Se acercan las fiestas de fin de año, todos pensamos en pasarla bien con nuestra familia o amigos, pensamos en el asado y la bebida, en los regalos y sorpresas, en la esperanza de comenzar un año nuevo lleno de alegría y sin problemas
Nos tomamos estas semanas para desconectarnos un poco de todas las malas noticias que día a día llegan a través de la pantalla del televisor y a los diarios o la radio
Pero no podemos darle la espalda a la realidad, esa realidad que nos estampa en la cara la muerte de una familia entera que desapareció un día, esa realidad que nos muestra que nunca cambio la historia política de este mundo de mayoría hambrienta y oprimida subliminalmente.
La realidad es cruda y no queremos verla, pero hay esta, la vivimos y la sufrimos o la ignoramos, depende de cada uno
También depende de cada uno hacer algo para que esta realidad de violencia, muerte y sufrimiento encubierto cambie para mejor
Un grano de arena es insignificante a los ojos pero una playa de arena blanca es lo más parecido al paraíso
Igual una gota de agua no hace diferencia en un vaso vacío,
Pero no son a caso esas mismas gotas las que forman los mares y lagos que embellecen este mundo?
Una sola persona no puede cambiar al mundo, ya hubo muchos que trataron de cambiarlo pero no fueron oídos, hubo gente que llego al interior de nuestros corazones pero poco a poco los vamos olvidando y así continuamos siendo ciegos, sordos y mudos
Será naturaleza humana el autodestruirse inconcientemente?
